Me dispongo a despertar las potencialidades que poseo para crear una vida de creciente bienestar, comprendiendo la vida como una aventura positiva y estimulante.
Me dispongo a quitar "el tapón" de mis propias limitaciones y dejar de tropezar "varias veces con la misma piedra".
Utilizaré estímulos y elogios... Adelante, soy capaz.
Voy a hacer posible lo imposible, a utilizar afirmaciones frente a la negación.
Recordándome que la manera más eficaz de lograr cambios de comportamiento no consiste precisamente en borrar anteriores programas de conducta indeseables, sino en proporcionar nuevas vías de actuación, dar nuevas opciones al "sistema central".
Mis creencias son, en realidad, los gobernadores del cerebro, como filtros predispuestos de mi concepción del mundo, tienden a apoyarme o sabotearme.
En la práctica, lo importante no es lo que sucede, sino de qué modo lo vivo. Como lo veo e interpreto dentro de mi consciencia.
Recuerdo que nada me "sucede" porque sí, sino que todo lo que me pasa lo he "creado" desde alguna creencia íntima y soterrada que me condujo a la acción.
Darme cuenta es la palanca inicial de mi propia evolución.
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